Digamos que he vuelto a tropezar con la misma piedra
¿Y qué? La gente no lo comprende, se trata de
mi piedra
, yo decido si quiero pasar todos los días por el mismo camino y encontrarme con ella. Al fin y al cabo, es más cómodo tropezarse con la misma piedra, te acabas
acostumbrando a la caída, y por lo menos puedes decir que
algo es tuyo de verdad. Total,
vayas por donde vayas, está todo plagado de piedras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario